PARA ENTENDIDOS.

Jehová de los ejércitos está con nosotros; Nuestro refugio es el Dios de Jacob. Selah SALMOS 46-11.

Buenos días, que la bendición y el amor de Dios sea sobre sus vidas.

Quizás para muchos de nosotros resulte ser más confiable y provechoso el hecho de poder ver a Dios, y a su ejército de ángeles cara a cara cuando pasamos por pruebas o circunstancias muy complejas en nuestras vidas, pero lamentablemente no sucede así. Sin embargo, tener muy claro el hecho de que es una realidad absoluta que somos protegidos y amados por Dios es el mayor acto de fe que podamos tener, frente a un padre que no vemos, pero sabemos que es real y tiene cuidado de nosotros.

No obstante, la biblia nos enseña que Jehová de los ejercicios siempre está alrededor nuestro, por consiguiente; cuando él mismo, es quien determina que debemos enfrentarnos a tiempos difíciles, esto se convierte para él en sinónimo de enseñanza, y para nosotros en señal de que su imagen crece y se perfecciona. Entonces, teniendo esto en cuenta, se hace visible que; en medio del problema, aceptamos nuestras debilidades, nos convertimos en personas dependientes de Dios, y entonces hallamos nuestra victoria.

Mis amados, los procesos en Dios determinan si verdaderamente creceremos o simplemente, nos daremos por vencidos. Talvez, vivir situaciones incómodas resulte ser como un hacha que golpea fuerte la madera, pero tengamos siempre presente que el golpe es necesario para moldear y perfeccionar nuestra fe, porque donde humanamente vemos líos y enredos, Cristo ve la oportunidad perfecta para hacernos más fuertes y enseñables.

Recuerda que, Dios tiene cuidado de todo, por eso el desierto fue donde Dios se le presentó a Moisés, fue en el desierto donde el señor permitió que el mar fuese abierto, fue en el desierto donde cayó maná del cielo, y lo más maravilloso es que fue en este mismo lugar donde la provisión, la compañía y el milagro no se hizo esperar.

Por lo tanto, gózate en medio del lugar de tu prueba, porque en el verás la mano de Dios obrar a favor de tu casa y de tu familia. Así que, en vez de llorar, bendice y en vez de quejarte, clama. Pero, clama creyendo que eres la fe que ha nacido de los fracasos, y ten presente que en tu proceso la mayor victoria la tendrás dando a luz, porque si el dolor te embaraza entonces nace la fe.

Mi amado, no existe cimiento más sólido que la fe, porque esta última no se basa en magia o lógica, sino en un principio eterno, por esta razón si entiendes lo que el señor está hablando a tu vida en esta mañana, entonces obtendrás la victoria en cualquier área de tu vida.

Finalmente, ten presente que tus decisiones en Cristo también van ligadas a la fe, por qué lo que haces y lo que piensas determina quién eres, y en lo que te convertirás, por lo tanto, vive tu proceso, pero confía en el señor y permítele a él mismo que te guíe en todo lo que hagas para que tus victorias sean cantadas con fuerza y valentía.

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