ENCIENDE LA LUZ.
- Jasser Manjarrez
- 20 sept 2022
- 2 Min. de lectura
¿O qué mujer que tiene diez dracmas, si pierde una dracma, no enciende la lámpara, y barre la casa, y busca con diligencia hasta encontrarla? LUCAS 15:8.
Buen día, que la bendición y el amor de Dios sea con todos nosotros.
En el presente pasaje del capítulo de Lucas encontramos la historia de una mujer que pierde una de sus diez monedas e inmediatamente inicia la búsqueda de la misma, por ende, narran las escrituras que esta mujer toma una lámpara y la enciende para recibir la luz que necesita al momento de adentrarse a su búsqueda, lo interesante de esto es que en aquel tiempo estas monedas eran consideradas de escaso valor, sin embargo, ella inicia una búsqueda incansable obteniendo como resultado el hallazgo de la misma.
No obstante, dentro de este ejemplo contextual, Jesús nos transmite un mensaje claro y conciso, el cual se basa en que, en algún momento de nuestras vidas, estuvimos perdidos bajos nuestros delitos y pecados, pero en efecto, así como aquella mujer pudo haberse quedado con las nueve monedas que le restaban, se detuvo a buscar diligentemente la que se le había extraviado y compartió con alegría la dicha de haber podido encontrar su moneda pérdida, por consiguiente, en este punto existen dos factores muy importantes y se ven evidenciados de la siguiente manera.
Así como esta mujer celebra con sus amigos el hallazgo de su dracma, así mismo el cielo se regocija cuando un pecador se arrepiente, pues, esto es sinónimo de que existe un plan de salvación para todos y tiene cumplimiento lo escrito en la biblia: Él es paciente con nosotros, no queriendo que nadie perezca, sino que todos se arrepientan” (2 Pedro 3:9). Mis amados, el arrepentimiento tiene que ver con lo profundo del corazón del hombre y una de las mayores evidencias de un arrepentimiento genuino se refleja cuando todas nuestras cosas son hechas con amor para proclamar el reino de Jesucristo.
Por consiguiente, la narrativa en este capítulo también refleja algo muy importante y es que está mujer enciende la luz para poder llevar a cabo su búsqueda, y esto mis amados, es el destello de una vida que porta la esencia de Cristo, pues una vez hallamos sido alcanzados por la misericordia del señor, nuestra preocupación debe ser encender la luz que portamos para ir tras aquellos que necesitan acercarse confiadamente al trono de la gracia, por lo cual, así como Jesús vino para ser la luz del mundo, así mismo nosotros hemos sido llamados, para portar claridad, en este sentido, la mujer de esta parábola representa, el afecto, y la voluntad que debemos tener para ir tras aquellos que se encuentran pedidos, pero tengamos en cuenta que inclusive muchos se encuentran extraviados en casa y nuestro deber con el cielo siempre será expandir su reino a través de la vida que portamos.
Bendiciones....







Comentarios