AMOR DIRECTO.
- Jasser Manjarrez
- 5 may
- 2 Min. de lectura
También debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos. 2 Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos 2 Timoteo 3: 1-2
Quizás muchos de nosotros hemos puesto nuestros ojos en otro tipo de señales que anuncian los tiempos del fin, pero se nos ha olvidado, lo que el apóstol Pablo habla a su hijo Timoteo, advirtiendo lo peligroso que serán los días, y no porque venga tsunamis, terremotos o alguna pandemia. Lo que señala Pablo es mucho mayor que eso, mostrando un amor desviado que inflama el corazón, provocando que la maldad crezca y lo espiritual se apague.
Sí, un amor desviado provoca que el hombre ponga sus ojos en él mismo, y no en su creador. Esta es la intención del espíritu del anticristo de desviar el amor hacia Dios, para que el hombre se concentre en sí mismo, y todo el que deja de mirar a DIOS para verse a sí mismo es despachado. Esto fue lo que le pasó a Lucero antes de la caída del cielo; dejó de ver a Dios para contemplarse a sí mismo. Esto parece casual, pero no lo es.
Este será el movimiento que desviará a miles, por eso tengan cuidado; cuando lo de Dios ya no te parece acorde, o no sientes ningún tipo de temor por su palabra, o has dejado de obedecer su palabra, dándole rienda suelta a tus pensamientos alejados de la verdad, sencillamente tu amor se desvió. Estas cosas dan señal de algo profundo, tu corazón ha sido hurtado desviándolo del sentido original que declara la palabra. Dice la biblia en Mateo 22:37 “Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente.”
Todo esto parece un atentado al mayor mandamiento, a ese mandamiento que nos mantiene alineados y respirando por él. A ese mandamiento que nos hace recordar que vivimos para darle placer, y no para engordar y saciar nuestras hambres de poder y vanidad. Cuando esta fórmula se rompe, el amor que sale del corazón del hombre no apunta a Dios, sino a sí mismo. Un amor en la vía invertida puede convertirse en el mayor destructor de los últimos tiempos. ¿Tú crees que la pandemia se llevó a mucha gente? Pues no te alcanzas a imaginar lo que hará un amor desviado.
Mi amigo, ten cuidado de ti mismo, porque el mal del hoy no vendrá por los extraterrestres, sino por la causa de un amor desviado, la destrucción de estos tiempos no vendrá de naves voladoras de otros planetas, todo esto vendrá producto de un corazón hinchado que ha quitado los ojos de su creador, desplazando a Dios de su trono para sentarse a él.
Con todo esto, debemos ser conscientes de que debemos cuidar el corazón. Esa palabra siempre la pronunciamos, pero quizás no tengamos el entendimiento para ver la en plenitud todavía. No te descuides y jamás permitas que tu amor vaya en sentido contrario, porque será tu mayor destructor.
Bendiciones.
Komentáře